Mayores de Sevilla 2018 -1

2 de octubre de 2018 Número 1

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Juntos para siempre

Plata. Salimos tras la merien- da, llegamos temprano y nos tomamos un refrigerio antes de entrar al Estadio Ramón de Carranza. Una vez allí compartimos espacio con seguidores del Betis, el club de mis amores y de Las Palmas. Tras un partido muy emocionante mi Betis se lleva la LXIV Edición del Trofeo Carranza, tras superar al U.D. Las Palmas por un 4-0. Nuestro equipo fuemuy su- perior de principio a fin, lleván- dose su sexto trofeo para casa. Y con esta victoria nos lleva- mos de esta hermosa ciudad toda nuestra ilusión al ver a nuestro equipo portar la gran- diosa copa como ganador. Hace cosa de un año, Ma- nuel cayó enfermo con Alzhe- imer y decidimos venirnos aquí, al Centro de Mayores Vi- talia Alcosa, aquí pasamos los días acompañados uno del otro, hacemos actividades, pintamos, jugamos al bingo, hago costura, gimnasia, jue- gos de palabras, aquí siem- pre hay algo que hacer para matar el tiempo. Nos encanta salir al patio a echar de comer a las palomas y estamos muy contentos tanto con el per- sonal como con todo, espero que podamos seguir así por muchos años más. po, cerca de Carmona y tras jubilarse Manuel nos fuimos allí a vivir. Allí celebramos la boda de mi hija pequeña, fue muy bonita. Manuel trabajaba en la fá- brica de vidrio, viajaba mu- cho por su profesión hasta que finalmente lo dejaron como jefe hasta su jubilación. Yo mientras tanto me encar- gaba de la casa, las niñas, y también de trabajar, cosía en casa para la calle y mientras mis niñas a nadar, aprove- chaba para llevar el trabajo terminado.

Dolores se fue al centro con su marido cuando éste enfermó

DOLORES RODRÍGUEZ CR Vitalia Alcosa

JUAN SERRANO Residencia de mayores de Marchena de Diputación Mi nombre es Juan Serrano Robles, soy natural de Estepa, tengo 76 años. Soy soltero, vivía con una tía, hermana de mi madre. Cuando ésta falleció me fui a vivir con mi hermana, que además de a sus hijos te- nía que cuidar a su marido en- fermo. Cuando mi estado de salud se deterioró solicité ingresar en una residencia. Me dieron la plaza en Estepa, pero pos- Me llamo Dolores Rodríguez Malmagro, tengo 89 años y soy de Sevilla, aunque criada en Tarsi, junto a Calañas, un pequeño pueblo de Huelva. He pasado toda mi infan- cia en Tarsi, criada con mis abuelos ya que mi padre fa- lleció cuando yo tan sólo te- nía 4 años y mi madre traba- jaba. Volvimos a Sevilla y con 16 años conocí a Manuel, era Semana Santa y estábamos en el puente de Triana cuan- do oficialmente nos hicimos novios. Tras 8 años de no- viazgo tomamos la decisión de casarnos y hasta día de hoy seguimos juntos. A los

24 años, al poco de casarnos nació nuestra primera hija, Dolores y 16 meses después la pequeña, Pepi. Cuando nos casamos vivía- mos en una casa de vecinos en la calle Sol, en el barrio sevillano de la Macarena, era

prácticamente una habita- ción. Cuando mis niñas te- nían 8 y 9 años nos mudamos a Marañón, frente al hospital virgen Macarena a un pisito que todavía conservamos. Con los años nos compra- mos una parcela en el cam-

La historia de Juan

teriormente fui trasladado a la Residencia de Marchena. Aquí me siento muy a gusto. Por mi forma de ser me llevo muy bien con todo el mundo. Pero he encontrado en dos perso- nas, además de buenos traba- jadores, una amistad, ellos son Antonio Manuel y José Anto- nio. Con ellos comparto mi día a día y a veces acudimos jun- tos a algunas actividades os cuento la más emocionante: Ha sido este pasado verano. El 11 de agosto acudimos al Tro- feo Carranza en la Tacita de