Gurme de la Provincia Nº 9 Otoño 2020

REPORTAJE

Monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles (Constantina) Una comunidad de jerónimas se instaló en este rincón de la Sierra Norte de Sevilla a mediados del siglo XX. El monasterio actual lleva poco más de una década abierto y se sitúa en la antigua casa de un belga exiliado después de la II Guerra Mundial. Estas monjas son capaces de desenvolverse en todos los terrenos de la artesanía. Elaboran y venden artículos litúrgicos, productos naturales para la higiene y el cuidado personal y, como no podía ser de otra forma, repostería. La peculiari- dad en este caso es que no solo elaboran dulces como bombones o tocinos de cielo, también aprovechan los recursos de la sierra para vender su propia miel y tipos de mermelada, incluso castañas y ciruelas en almíbar.

Convento de Santa Clara (Alcalá de Guadaíra) La orden de Clarisas Franciscanas son una institución señera en la localidad alcalareña. El convento fue fundado por Francisca Gallegos de Ledesma a finales del siglo XVI y ha sufrido va- rias reconstrucciones. De la edificación original conserva aún la estructura, los arcos del claustro y la iglesia de una nave, con un retablo mayor traído desde el Hospital de las Cinco Llagas. La repostería de las clarisas se conoce en todo Alcalá y es una de las más antiguas entre los conventos de la provincia de Sevilla. Nunca fal- tan a la muestra anual con sus tortas, bocaditos de yema o bizcochitos y mazapanes rellenos. En total, hasta medio centenar de recetas salen de su obrador.

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