ASÍ FUE CORDOBA 2021

ASÍ FUE CÓRDOBA 2021 23

ABC

VIERNES, 31 DE DICIEMBRE DE 2021

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PAC: tres siglas paraun cambiodemodelo En 2021, se cerró en Bruselas el acuerdo de la nueva Política Agraria Comunitaria (PAC), que establecerá nuevas reglas del juego en la inter- vención pública del sector primario a partir del año 2023. El acuerdo ha sido claramente defendi- do por el ministro de Agricultura, el cordobés de adopción Luis Planas, único miembro del Consejo de Ministros ligado a la provincia tras la salida de Carmen Calvo de la vicepresidencia del Gobierno. También ha sido específicamente criticado por las organizaciones agrarias porque supondrá un recorte de la remuneración vía subvenciones que reciben los profesionales de la agricultura en la comunidad de Andalucía y Córdoba. El nuevo modelo pivota sobre una mayor exigencia ambiental de forma que son los propietarios de las explotaciones los que tienen que cumplir una serie de protocolos para el acceso a las ayudas. Los reglamentos de reparto nacional de los fondos están siendo una fuente de polémica entre el Gobierno y el sector.

la sequía deja los campos don- de pasta el ganado converti- dos en eriales, lo que obliga a alimentar a los animales con pienso, encareciendo los cos- tes de producción. Es por ello que las patrona- les agrarias esperan expectan- tes la publicación del decreto del Gobierno central con las medidas compensatorias por las pérdidas ocasionadas ante la imposibilidad de poder te- ner acceso al agua para el cam- po. Porque la única esperanza es que esta caiga del cielo, y eso es siempre una lotería. Como el Covid-19, la sequía deja secuelas en el campo que aparecen meses o años más tarde. Es el caso de los cultivos leñosos, como el olivo, el al- mendro o el naranjo. En el es- cenario actual de sequía sólo se garantiza el riego de super- vivencia para estos cultivos. Ya no se coge agua de los pan- tanos, canales de riego o cau- ces de ríos para que el fruto mejore su calibre y la produc- ción seamás rentable. La poca agua que llegará servirá única y exclusivamente para evitar que el árbol se seque. Y aun- que la expresión no sea lamás adecuada en este contexto, llueve sobre mojado. Porque

el campo cordobés lleva su- friendo una sequía silenciosa desde hace años atrás. Concre- tamente, el pasado año agrí- cola los regadíos vieron mer- mada su dotación al 50 por ciento. Es decir, en 2020 las plantaciones recibieron la mi- tad de agua que en 2019, y el próximo año ni eso. Los pan- tanos no han llegado a su lími- te en cuestión de un año. Aquellos agricultores que hayan reconvertido sus culti- vos para optar por plantacio- nes más rentables, fundamen- talmente almendros y olivar de regadío, pueden ven com- prometida su inversión ante el déficit hídrico que acumulan los árboles y que se verá agra- vado si no llueve. No es lomis- mo perder la producción de un año que perder una plantación en la que se lleva años espe- rando a que los árboles ten- gan lamadurez suficiente para comenzar a dar frutos. Ade- más, ante un estrés hídrico ex- tremo, la recuperación de las producciones tarda de uno a tres años después de que fina- lice la sequía. Si se echa la vista atrás, el último ciclo de sequía en el campo andaluz es motivomás que suficiente para que salten

quedaron plasmada por decre- to. Desde que la CHG declara- se el estado de sequía el pasa- do 2 de noviembre todavía no ha habido avance alguno so- bre el decreto que debe apro- bar el Gobierno central sobre las medidas que se adoptarán para afrontar la difícil situa- ción por la que atraviesan los agricultores y ganaderos cor- dobeses. Se da la paradoja que en el último ciclo de sequía el cam- po de Córdoba contaba con menos embalses que en la ac- tualidad. La entrada en funcio- namiento en la última década de los pantanos de El Arenoso y La Breña II no han servido para afrontar conmayores ga- rantías los periodos secos, ya que la cuenca del Guadalqui- vir ha sido la primera de Espa- ña en declarar la situación ex- traordinaria de sequía. Ade- más, pese a contar con dos pantanos de reciente construc- ción, desde 2005 no se ha crea- do ni una nueva hectárea más de regadío, es decir, las conce- siones que otorga la CHG a los regantes siguen siendo lasmis- mas, pese a las continuas rei- vindicaciones del agro cordo- bés por aumentar su capaci- dad de riego.

las alarmas. Hasta tres años, los que van del 2006 al 2008, se mantuvieron las restriccio- nes a los regantes y al campo en general. Entonces, el Ejecu- tivo central articuló una serie de medidas compensatorias, como exenciones fiscales o lí- neas de ayudas específicas que

De 2006 a 2008 El último ciclo seco se diferencia del actual en que, por entonces, el campo no contaba con El Arenoso y La Breña II