ESPECIAL PASIÓN EN CÓRDOBA 2020

BUJALANCE

Tradición romana DECLARADA DE INTERÉS TURÍSTICO, CUENTA CON UNA AMPLIA IMAGINERÍA DE MARTÍNEZ CERRILLO Y LOS DESFILES CENTENARIOS DEL IMPERIO ROMANO

POR FERNANDO LÓPEZ

FOTOS: A.A. CARAZO

S e puede decir que la Semana Santa de Bujalance comienza a tomar la forma más parecida a lo que es ahora en la segunda mitad del siglo XVI, cuan- do se fundan cuatro cofradías de carácter peniten- cial: la Santa Vera-Cruz, que procesionaba el Jueves San- to; las Angustias y San Nicolás de Tolentino, que proce- sionaban de forma conjunta en la tarde del Viernes Santo; el Santo Entierro de Cristo, que también lo hacía el Vier- nes Santo por la tarde, y la hermandad de Nuestro Padre Jesús Nazareno que procesionaba en la Madrugada. Los primeros testimonios documentales relacionados con corporaciones de índole pasionista en Bujalance están vinculados con la devoción a las Angustias y a la Soledad de la Virgen. La fundación de esta hermandad es entre los años 1561 y 1562 y es el origen de la Semana Santa buja- lanceña. Así comenzó una Semana Santa que se vio pa- ralizada tras los decretos de los obispos cordobeses de los siglos XVIII y XIX. Las procesiones se vieron reduci- das a la Vera-Cruz en la tarde del Jueves Santo y al Naza- reno al amanecer del Viernes Santo. Pese a que las procesiones no pasaban por su mejor momento, las clases populares mantuvieron sus tradicio- nes religiosas, como la representación del escuadrón de soldados romanos, germen de la actual corporación del Imperio Romano, una de las señas de identidad de esta fiesta, declarada en 2003 de Interés Turístico Nacional de Andalucía. El siglo XIX no fue muy distinto al anterior,

también debido a la inestabilidad del país. No fue hasta el siglo XX, en concreto en los años correspondientes a la dictadura de Primo de Rivera, cuando se reactivó el mun- do cofrade en Bujalance con la fundación de la cofradía del Resucitado en 1928. Las hermandades comenzaron a emerger de nuevo des- pués de la Guerra Civil, en que se quemó a muchas de las imágenes. Antonio Castillo Lastrucci realizó las imáge- nes de Nuestro Padre Jesús Nazareno y Nuestra Señora de los Dolores, mientras que el imaginero local Juan Mar- tínez Cerrillo, reconstructor de la Semana Santa de Cór- doba y de la provincia en aquellos años, realizó las nue- vas imágenes de Jesús de la Oración en el Huerto y Nues- tro Padre Jesús Rescatado. Donó además la Virgen de la Esperanza. Así, la segunda mitad del siglo XX fue de au- téntico auge, con la recuperación de la procesión de la So- ledad en 1965 y la incorporación de la Buena Muerte un año después por parte de la Corporación Municipal. Tras una década de crisis, en 1982 se fundó la cofradía de la Entrada Triunfal, en el 90 la hermandad del Vía Crucis y un año después la agrupación de portadores del Cristo de la Buena Muerte. En 1993 se fundó la cofradía de Nazare- nos del Santísimo Cristo del Gran poder y ya en 1996 la hermandad del Cristo de la Buena Muerte y la Soledad, que en el 2000 incorporó la imagen del Cristo Yacente en el Sepulcro. En la actualidad, la Semana Santa de Bujalance comien-

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PASIÓN EN CÓRDOBA

BUJALANCE, TRADICIÓN ROMANA