ESPECIAL 90 ANIVERSARIO ABC SEVILLA 12-10-2019

JUAN PABLO II Sumo Pontífice Una historia de afecto

VIDAS DE PAPEL

CELEBRÓ EN EL CAMPO DE LA FERIA LA PRIMERA BEATIFICACIÓN FUERA DE ROMA DE LA HISTORIA DE LA IGLESIA

POR STELLA BENOT

L A sonrisa de Juan Pablo II nada más ser el resumen de aquella jornada del 5 de noviembre de 1982 en la que un Papa de Roma visitaba Sevilla por primera vez. La estancia del Santo Padre duraba poco más de ocho horas, pero toda la ciudad se volcó para que fuesen inolvidables. Y lo logró. Fue la jornada más destacada de la visita pastoral que Juan Pablo II realizó ese año a España, que duró diez días, y en la que recorrió numerosas ciudades (algunas tan relevantes como Guadalupe, Santiago de Com- postela, Ávila o Madrid). Pero ninguna como Sevilla, que se lanzó a las calles para mostrar calor y afecto a un Pontífice que siempre recor- daría a lo largo de su vida, como él mismo confesó posteriormente. Todo fue especial en la primera visita del Papa (volvería a Sevilla por segunda vez en 1993). En primer lugar, porque él así lo quiso. Decidió celebrar una beatificación fuera de Roma por primera vez en la Historia de la Iglesia. Eligió 90 AÑOS DE ABC DE SEVILLA bajarse del avión en el aeropuerto de San Pablo viendo a las parejas bailando sevillanas en la pista de aterrizaje podría

además la ciudad natal de la beata (ya santa) para rendirle los más altos honores en un reconocimiento que las Hermanas de la Cruz aprecian en lo que supuso. Sor Ángela, Madre Angelita como la conocían sus pobres, subió a los altares nada menos que en el campo de la Feria, delante del retablo del orfebre jerezano Juan Laureano de Pina y ante quinientas mil personas que abarrotaban todos los espacios disponibles. Y eso que era viernes, jornada laborable. Pero no importó. Hubo muchos sevillanos, y andalu- ces de Córdoba, Huelva, Cádiz y Málaga que se desplazaron en autobuses especiales para la ocasión, que faltaron al colegio, pidieron permiso en los trabajos y se armaron con termos de café, bocadillos, dulces, mantas y sillas de playa para pasar la noche al raso y coger un buen sitio dentro de los sectores asignados en los diferen- tes espacios en los que se dividió el recinto donde se monta la calle del Infierno. Había tribuna para las autoridades de la época —ellas vestían con mantilla negra— pero el papamóvil recorrió todas las calles interiores del recinto, saludando y bendiciendo a quienes lo

23/3/1985 El Papa saludó en la sala Pablo VI a una representación de la hermandad del Rocío de Triana que había peregrinado a Roma con el hermano mayor, Ignacio Sánchez- Ibargüen, a la cabeza

Made with FlippingBook Annual report