La iniciación a los deportes individuales: el Modelo Ludotécnico y sus posibilidades

Capítulo 5. Modelo Ludotécnico y sensibilización hacia las personas con discapacidad visual Autores: Roberto Ferriz 1 , Inma López-Garde 1 1 Facultad de Magisterio, Universitat de València. 1. Introducción y marco teórico A través de la Educación Física (EF) el profesorado trata de formar una ciudadanía autónoma que adquiera competencias para estar física y socialmente educada hacia la convivencia con otras personas y el contexto que le rodea. La EF es una disciplina escolar que tiene como fin propio la educación de las conductas motrices, lo que caracteriza su especificidad pedagógica y pertinencia didáctica. Bajo esta premisa, el profesorado que aplica criterios de lógica interna para organizar o clasificar los aprendizajes que enseñar, puede relacionar directamente cada bloque de saberes con determinadas actividades físicas, deportivas y artístico expresivas, que pueden agruparse en cuatro tipos de experiencias motrices que estructuran la EF (experiencias motrices de marca medible, con incertidumbre del medio, de tipo antagónico y/o cooperativo y de tipo expresivo y estético). En el caso que nos ocupa en este libro, las actividades atléticas o de atletismo que se enseñarían bajo el Modelo Ludotécnico (MLT) de Valero-Valenzuela y Conde (2003) se corresponderían con experiencias motrices de marca medible (Favriou et al., 2024). Si profundizamos en el actual currículo escolar a nivel nacional (p. ej., ver Real Decreto 217/2022), el área ha sido organizada en torno a cinco competencias específicas concretadas a través de criterios de evaluación que se adquieren movilizando los saberes básicos agrupados en seis bloques que pueden guardar relación con aprendizajes trasversales (vida activa y saludable; organización y gestión de la actividad física), aprendizajes que se pueden dar a través de las conductas motrices (autorregulación emocional e interacción social en situaciones motrices; manifestaciones de la cultura motriz; interacción eficiente y sostenible con el entorno) y aprendizajes propios de las conductas motrices (resolución de problemas en situaciones motrices). Estos bloques se presentan a fin de ofrecer una EF en la que el área constituya la base de una alfabetización motriz, destacando en el currículo actual la apuesta por dar valor a los aprendizajes relacionales y afectivos (p. ej., fomento de las relaciones inclusivas y constructivas, las conductas prosociales o la identificación y rechazo de conductas contrarias a la convivencia) que se pueden adquirir a través de las conductas motrices en un ambiente de respeto ante la diversidad. Entre estos aprendizajes podrían estar los relacionados con la actitud hacia las personas con discapacidad en un contexto físico-deportivo. Aterrizando en las necesidades docentes de dar respuesta al currículo durante el día a día, como se ha mostrado anteriormente, los aprendizajes sobre la dimensión del“saber ser”que se adquieren a través de las conductas motrices parecen cobrar una importancia vital en la actual EF que se rige por competencias específicas para la materia. En este sentido, el capítulo que se presenta a continuación puede ser útil para proporcionar al profesorado herramientas que enriquezcan las propuestas de experiencias motrices que programa (p. ej., actividades atléticas), con el fin de abordar una amplia gama de competencias específicas, lo que puede contribuir significativamente a elevar la calidad de la EF. En el contexto específico que abordamos en este capítulo, este enriquecimiento se dirige especialmente hacia la mejora de las