LA ILUSIÓN
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Antonio Pérez
Mancha Real
No recuerdo lo de ayer, pero sí lo de hace más de
50 años, cuando vivía con mis padres y hermanos
junto a la familia Rosa, en la calle San Francisco de
Mancha Real. La familia Rosa, nos tenía alquilada
la casa que compartíamos con ellos en los meses
abril-octubre. El resto del año lo pasábamos en
Caniles. Mi padre era el maestro de la factoría de
extracción de aceite de orujo, situada a unos 10
km. de Mancha Real, por la carretera hacia Jimena.
Evidentemente en los meses de campaña, la
factoría presentaba una mayor actividad y mi
padre no podía faltar. Cuando nos asentábamos en
Mancha Real, éste regresaba todas las tardes al
pueblo en su moto.
La familia Rosa estaba formada por Manuel y Ana
María, junto con sus hijos Ana, Luis y la abuela
Dulce.
La familia Pérez la constituían los siguientes
miembros, comenzando por los padres:
Francisco, Carmen, Manuela, Francisco, Emiliano,
Antonio (un servidor) y María del Carmen, la más
pequeña. Precisamente nació en esta casa.
Nosotros dormíamos en las habitaciones de la
planta alta y ellos en la planta baja. La comida se
realizaba en común, a veces en el comedor de la
planta baja, o en la cocina que lindaba a un
hermoso patio lleno de macetas, muy bien
cuidadas por Dulce.
En realidad, todos nos sentíamos como una gran
familia. Mi hermana Manuela o "Loli", gustaba
pasear con Ana o "Anita" y flirtear o "ligar" con
los que serían sus futuros esposos. Ahora
comprendo cuando pasé por esas edades... Las
ilusiones aunque distintas, son muy intensas.
Mi otro padre era Manuel Rosa: barbero, músico
de la banda municipal de Mancha Real, de la que
llegó a ser el maestro, hombre muy culto,
empedernido lector; tenía un libro de ciencias