Bulevar Sur Sevilla Otoño 2018

| En el mundo de...

Posado junto a un retrato y uno de sus diseños.

«Al igual que yo aspiro a rodearme de arte y diseño, me gusta pensar en un mundo en el que, por ejemplo, compramos flores porque sabemos que nos harán más felices»

Hoy no está solo, le rodean tiendas de moda ecológica, artesanos, diseñadores, talleres de artistas y librerías en las que el público puede tomarse un café, leer o asistir a un taller de alfarería. Lugares de barrio en los que se ofrece un trato personalizado, que cuidan los detalles. «¿No es maravilloso? El comercio sevillano se había quedado un poco rancio y hoy ha dado un giro increíble. Hoy vienen a visitarnos personas de todas las zonas de la ciudad y cada día más de fuera de Sevilla. El cambio no es sólo del tejido empresarial sino también de los sevillanos, que han avanzado con nosotros». Amor en cada oficio Con todo, el secreto de su forma de proceder es poner pasión en todo lo que hace. «La pintura es más de estómago. Puedo estar semanas sin pintar y dos meses encerrado en el estudio. Con la moda, en cambio, adquiero compromisos con los que tengo que cumplir sí o sí. Pero nunca lo hago si no hay una verda- dera motivación detrás». En su día a día, a García Forcada le gusta primero conocer bien a la clienta que acude al taller, estudiar su estilo, su manera de expresarse… Autodidacta en la moda, también le costó su tiempo superar el síndrome del impostor y presentarse como un diseñador. «Cuando diseño moda, pienso en una mujer con actitud. Aquella que llega a una fiesta con un vestido camisero, la melena sin atusar y casi sin maquillar y logra ser la mejor del evento. Estas mujeres que no pretenden llamar la aten- ción pero a las que no puedes dejar de mirar», explica. Al momento, señala un marco con una fotografía de su abuela: «Ella era así, tenía ese garbo, como lo tiene también mi madre. Sin embargo, tengo claro que cuando trabajas en moda, hay que aspirar a vestir a todo tipo de mujeres».

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