Cádiz de norte a sur

El buen estado de conservación de Baelo Claudia permite al visitan- te apreciar desde parte de un acueducto y la necrópolis , extramuros, hasta los principales edificios rodeados por la muralla: el centro mo - numental, presidido por el foro y compuesto por diferentes construc- ciones; el mercado, las termas o los tres templos del área religiosa , entre otros. También se encuentra en buen estado de conservación el complejo industrial , que era el barrio salazonero, y el teatro. En este último espacio se puede disfrutar, cada verano, del Festival de Teatro Anfitrión , con representaciones nocturnas en este marco incompara- ble. La edición de este año se celebra del 5 al 31 de agosto. Los romanos de Ubrique y los fenicios de Cádiz Ahora dirigimos nuestros pasos más al norte, hasta Ubrique , y nos si- tuamos en el siglo VI a.C. En esta fecha está datado el origen del ahora Yacimiento Arqueológico de Ocuri , declarado Bien de Interés Cultural. En la cima del Salto de la Mora se encuentran los restos de la que fue una importante ciudad prerromana y romana, cuyomáximo esplendor se vivió en el siglo II a.C. Así lo demuestran los vestigios que todavía nos dejan ver la que fue su muralla ciclópea de origen ibérico , mo- dificada posteriormente en varias ocasiones. Ya en el interior, Ocuri nos muestra restos de varias cisternas, del foro de la ciudad con parte de sus tabernas, de viviendas y edificios públicos y hasta de unas im - presionantes termas situadas en la zona alta del yacimiento. También destaca, extramuros, la necrópolis y su monumento más importante: el mausoleo. Siguiendo el rastro de los primeros pobladores de las ciudades gadi- tanas nos trasladamos hasta la capital. Y es que Cádiz está considerada la ciudadmás antigua de occidente , cuyos orígenes se remontan al año 1100 a. C. En esa fecha, los fenicios fundaron Gadir, uno de los asenta- mientos fenicios más antiguos de Occidente . Sus restos se conservan en el yacimiento arqueológico ubicado bajo el Teatro del Títere. Este yacimiento de la ciudad de Gadir se estructura en distintos planos que corresponden a las diferentes épocas de ocupación del asentamiento. Destaca el trazado de calles, viviendas y utensilios datados en el siglo IX a.C. También se conservan ocho viviendas. Pero después de los fenicios llegaron otras muchas civilizaciones. Cartagineses, romanos, visigodos y musulmanes poblaron la ciudad que pasó a manos cristianas después de la Reconquista.

En la imagen superior, pinturas de Goya en la Santa Cueva de Cádiz y, sobre estas líneas, el monumento a Las Cortes, también en la capital

De la Gades romana se conserva el teatro del siglo I a.C., en el actual barrio del Pópulo. De épocas posteriores son innumerables los monumentos y espacios que podemos desta- car. Ejemplo de este importante patrimonio cultural que atesora la capital gaditana es la Catedral, que mezcla estilo Barroco y Neo- clásico , y que dibuja la silueta de la ciudad vista desde el mar. Otros puntos de interés los encontramos, por ejemplo, en la plaza de San Francisco, donde se ubica el Oratorio de la Santa Cueva , un emblemático monumen- to del siglo XVIII con pinturas de Goya en su interior. La plaza de San Antonio alberga el Oratorio de San Felipe Neri , templo barroco que custodia una Inmaculada de Murillo y que fue sede de las Cortes de Cádi z, donde se

Panteón de Marinos Ilustres, en San Fernando

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