Especial Andalucia, abierta por vacaciones 2022

En Málaga , es de arraigada tradición marenga local el freír pescados pequeños, los de menos valor, en los merenderos junto a la playa

lejos, la barra de El Faro y sus afamadas torti- llitas, su choco frito o su dorada frita en tacos con su espina crujiente. En El Puerto de San- ta María vamos hasta El Pescaíto para probar sus imprescindibles boquerones adobados o el gallo empanado aunque el resto de frituras no desmerezcan. Finalizamos este paso por tierras gaditanas haciendo escala en nuestro camino hacia Málaga en uno de los lugares más singulares de la costa andaluza, Las Re- jas, donde los hermanos Domínguez, Carlos y José, hacen magia con la sartén y consiguen frituras de altísimo nivel. Hasta se atreven con pescados enteros de considerable tamaño como el borriquete o el pargo. Nos detenemos ahora en Málaga, tierra de fritura por excelencia. No en vano se la ape- llida «malagueña» y es de arraigada tradición marenga local el freír pescados pequeños, los de menos valor, en los merenderos junto a la playa. Necesariamente tendremos que hacer parada en Los Marinos José, al final del Pa- seo Marítimo de Fuengirola. Pablo Sánchez fríe con tremenda precisión como pocos todo lo mejor que la lonja ofrece a diario: desde humildes boquerones a lujosas langostas.

Al final del paseo marítimo de Fuengirola nos espera Los Marinos José, con una deliciosa carta de fritos

Imprescindible resulta su gallineta frita en trozos gruesos, crujiente y gelatinosa. Aun- que, a decir verdad —y afortunadamente— hay muchos sitios que cuidan bien su fritura en la provincia. La bordan en El Saladero, en La Caleta de Vélez, donde juegan con la ven- taja de tener la lonja a escasos metros: Igual que en Chinchín Puerto. Y también en Casa Merchan, en San Pedro de Alcántara, con sus gambas en gabardina y sus boquerones al limón. Como también lo hacen El Yerno, en pleno Mercado de Atarazanas, en restau- rantes de Pedregalejo como El Caleño o en Hermanos Alba , en la barriada marinera de El Palo. Y en muchos más que se nos quedarán a un lado por falta de espacio. Continuaremos camino, pues, para de- tenernos en Granada. Y no sólo en su costa. Porque en ese pequeño gran lugar que se lla- ma Bar FM , Rosa Macías y Paco Martín sirven una de las frituras más convincentes de la re- gión, siempre seca, sin una gota de aceite de más. Ortiguillas, puntillitas, calamares... Lo mejor de la lonja de Motril. La Najarra, en Al- muñécar, es parada obligada. Un restaurante humilde que ha construido su reputación a base de unas frituras excelentes y abundan-

En El Saladero, en La Caleta de Vélez (Málaga), además de preparar un excelente pescaíto frito, espetan un buen número de especies

50

Made with FlippingBook - professional solution for displaying marketing and sales documents online