BUENOS DÍAS CON ALEGRÍA
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Seguro que los más jóvenes se acuerdan de lo bien
que lo pasaron ayer, y no se acuerdan de su niñez.
A mí me sucede lo contrario; recuerdo mis primeros
años, al cobijo de los padres en la fábrica de
extracción de aceite de orujo, "Caniles". Recuerdo
que no tenía noción del tiempo, sobre la era plana
de un montón de orujo, divirtiéndome con toda clase
de juegos; entonces era muy feliz, toda vez que no
tenía la necesidad de ser útil para algo; a diferencia
de mis padres en su lucha diaria, en aras del
sustento, sobre todo para los más pequeños de mi
familia.
Mi homenaje a los padres cuyo sacrificio diario, a
veces muy cercano al martirio de tantos santos que
están en los altares. Hoy por hoy, no creo en los
santos tal como se conciben en la religión católica,
porque hay tantos que no existen artistas suficientes
para crear altares para todos. Destacar unos sobre
otros con honores de endiosamiento, lo considero un
acto de hipocresía hacia la humanidad, aunque si
hay que mencionar ciertos personajes por su
trayectoria. Todos no somos iguales.
En mi opinión los milagros no existen. Solo la
voluntad y el esfuerzo de los miembros de la familia
con capacidad de producir, son los únicos que
pueden dar honor y estabilidad a las necesidades de
los individuos más débiles; este eslabón nunca se
debe romper, porque es progreso hacia la verdadera
cadena humana. Única verdad conocida sobre