ABC PROVINCIA 08-11-2016

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abcdesevilla.es/provincia MARTES, 8 DE NOVIEMBRE DE 2016

Écija

Cañada Rosal · Écija · Fuentes de Andalucía · La Luisiana

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CAÑADA ROSAL

ÉCIJA

parados. Al cierre de octubre, ape- nas hay dos personas más, 256, re- gistradas en las oficinas del SAE, de las que 112 son hombres, los mismos que en septiembre, y 144 mujeres. Desde enero, el paro ha bajado en Cañada en 10 personas.

ayuda de 24.000 euros para desarro- llar un proyecto de inserción socio- laboral de personas con discapaci- dad. Se prevé que el I Plan de Pro- moción de la Inserción Socio-Laboral de La Raíz tenga unos 120 beneficia- rios directos.

El desempleo se mantiene en cifras casi idénticas en Cañada Rosal res- pecto al mes de septiembre, cuando se contabilizaron en la localidad 254 Leve subida del paro en Cañada Rosal

La Obra Social La Caixa ha otorga- do a la Asociación de Padres y Ma- dres de Personas con Discapacidad Intelectual y Sensorial La Raíz una La Caixa financia un plan de inserción de La Raíz

libertad y dan pistas de dónde lo han escondido para que otros jugadores también puedan hallarlo. No hace ni un mes que la iniciativa se instauró en la localidad y su comu- nidad de Facebook ya va por los más de los 1.100 miembros y hierve cada día de actividad con fotos de los libros apresados ymensajes como éstos: «Va- mos a liberar estos dos libros infanti- les ¡Atentos a las pistas, cazadores!». A la aventura se ha apuntado inclu- so el Ayuntamiento, que el Día de las Bibliotecas liberó varios ejemplares en puntos emblemáticos de la ciudad. De hecho, para poder gestionar toda esta adrenalina por la lectura, María del Carmen ha tenido que crear dos administradores más. Incluso, hay quien está aprendiendo a manejar in- ternet a través de este grupo. «Inten- to ayudarlos a los miembros para que se vayan familiarizando con el funcio- No obstante, la impulsora de la inicia- tiva advierte de que se trata de un jue- go con el que se busca que todos los miembros se diviertan, se relacionen en espacios públicos y se apasionen por la lectura, pero «no se trata de una competición por ver quién caza más libros». «Aquí nadie gana puntos por los libros que se cacen. Si alguien caza dos o tres libros a la vez, lo cual resul- ta muy complicado de leer, están evi- tando que otros puedan cazarlos y dis- frutarlos», advierte. María del Carmen Ruiz cuenta una anécdota que ilustra muy bien el espí- ritu del juego: una noche reciente, una madre salió con su hija en pijama y za- patillas a la caza de un libro, pero cuan- do llegó al lugar había ya otra madre con su niña buscándolo también sin poder encontrarlo. Al final, unas se ayu- daron a las otras cazarlo. «Compañe- rismo ante todo», destaca. Actualmente circulan más de un centenar de libros por Fuentes de An- dalucía en continuo movimiento: de unas manos pasan a otras que las en- cuentran con ilusión escondidos en el más inesperado rincón del pueblo. namiento de internet», dice. No es una competición Más de cien obras Circulan por el municipo más de cien libros de todos los géneros, cazados y liberados sin descanso

A.L.

Los cazadores de todas las edades encuentran libros escodidos en los lugares más inesperados

tos a salir solos, en familia o en pan- dilla a cazar los libros que otros «libe- ran» en los más variados lugares: ca- binas de teléfono, árboles o la Fuente de la Reina, de origen romano. Detrás de esta fiebre de la caza del libro se encuentra María del Carmen Ruiz Serrano, una esteticista que lan- zó esta iniciativa por curiosidad y que se ha visto superada por la agitación que se vive en el municipio. «Jamás pen- sé que pudiera tener tanto éxito. Unos días después de crear el grupo, mi ma- rido bajó a la tienda a comprar y cuán- do volvió me dijo sorprendido: ¡No te lo vas a creer, el tema de conversación en la tienda son los libros!», cuenta. ¡Atentos a las pistas! El funcionamiento es muy sencillo, ex- plica María del Carmen, mediante un grupo de Facebook los distintos juga- dores publican imágenes y pistas de dónde han escondido los libros y el resto tienen que encontrarlos. Tras ha- llarlo, se lo pueden llevar para leerlo y, una vez leído, lo vuelven a dejar en

Un grupo de Facebook de cazadores de libros saca a la calle a más de 1.000 personas a buscar libros ocultos A la caza de los libros escondidos

ÁNGELA LORA FUENTES DE ANDALUCÍA F uentes de Andalucía se ha lle- nado de cazadores. Aparecen por todas partes: escudriñan en los alrededores de los cole- gios, parques o monumentos en cual- quier momento, incluso de madruga- da en pijama y zapatillas de casa. Pero no, no son cazadores de Pokemon Go,

su presa es algo más tangible y anti- gua que los seres virtuales de este vi- deojuego: son libros. Los cazadores de libros se están ex- tendiendo como la pólvora en diferen- tes países (el grupo original «Chas- seurs de Livres» tiene más de 70.000 miembros) y ha calado de manera ex- traordinaria en este municipio sevi- llano, logrando convocar a niños y adul-

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