Previous Page  184 / 264 Next Page
Information
Show Menu
Previous Page 184 / 264 Next Page
Page Background

carlos hernández Quero:

En un mundo global e interconectado, sin pro-

blemáticas aisladas, la exigencia de conocimientos en economía cada

vez es más acuciante para el desenvolvimiento futuro de la ciudada-

nía y para poder dar respuesta a los retos de nuestro presente.

¿Crees que recibe la atención que merece? ¿Qué lugar crees que de-

bería ocupar la economía en los planes de enseñanza de Secundaria

y Bachillerato de “Estudio”?

Jorge fabra utray:

La Economía no está tratada como debiera en la en-

señanza. Pertenecemos a una especie animal, el Homo Sapiens que es

una especie económica, el Homo Economicus. Todos los pasos que

nuestra especie ha dado a lo largo de su existencia los ha dado midien-

do el beneficio y el coste de cada paso. Con mayor formación económi-

ca de los ciudadanos, mayor capacidad tendrá la ciudadanía para resol-

ver en un sentido de progreso, sostenibilidad y bienestar la apreciación

que haga del balance entre beneficio y coste de sus decisiones. En ese

sentido la Economía debería ser una asignatura mejor tratada en la en-

señanza escolar. Se ha de lograr transmitir una enseñanza de la materia

en sus términos conceptuales más necesarios para que los estudiantes

tengan una mayor capacidad de comprensión ante los retos venideros

que encuentren. Es preciso explicar, por ejemplo, qué es el precio, qué

es el dinero, qué es el tipo de interés. Todas estas cosas envuelven la

vida cotidiana de los ciudadanos. Es necesario que un estudiante de 14,

15 ó 16 años sea capaz de discernir que el tipo de interés es el precio

de un bien que se llama dinero. Así entenderá qué es la inflación y la de-

flación y entenderá que para que las cosas se muevan es necesario un

cierto desequilibrio porque si este no se produce no somos capaces de

dar un paso hacia adelante. A la vez, ha de saber que este desequilibrio

no puede ser muy grande para no tropezar o que la deflación es un muy

mal síntoma de la salud de una economía.

He oído muy recientemente a algunos políticos de este país jactarse

de que los precios estaban bajando, sin caer en la cuenta de que en ver-

dad eso es un desastre. Seguramente si hubieran estudiado un poco de

Economía no se hubieran jactado de tal cosa.

182

Intervenir en el mundo, una actitud ética