OASIS
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el espacio...No fue así, al caer al vacío,
rápidamente me topé con la nebulosa...No
recuerdo más... Estaba en el desierto, al lado del
arbusto que dejé, junto a una damisela de ojos
negros que destacaban entre un turbante azul
celeste. Me ofreció un vaso de leche de camella, y
me dedicó la danza del vientre que iba a
interpretar. Dicen que esta leche vigoriza el sexo
en los hombres; tal vez, después de la danza que
representa la fecundidad en el vientre, me
insinuara hacer el amor; pero mi amor, no es de
este orden. Amo al pueblo Saharaui por su
sencillez, sinceridad, trabajo, orgullo...No merece
la cautividad en el desierto, aún más cruel que la
de Jesucristo, según los cuentos de la Biblia.
Los saharauis me hablaban de su paraíso robado,
con temperaturas suaves, y pasto para sus rebaños,
lejos del abrasador sol y de las tempestades de
viento y arena, más bien en sintonía con el
Infierno. Hablaban de Dajla, Villa Cisneros en
español, un oasis de belleza entre el desierto y el
mar.
En la desembocadura del Río de Oro, los
españoles fundaron Dajla en 1884 con el nombre
de Villa Cisneros. Este pequeño puerto pesquero
se sitúa al borde de una magnífica laguna de aguas
turquesas. Además de acoger a miles de aves
migratorias como colonias de flamencos rosas, la
bahía alberga la mayor población de focas monje.
En sus aguas también se crían rayas y delfines
jorobados del Atlántico.
La población autóctona en continuo acoso por el
pueblo marroquí; sufre las peores vejaciones,
torturas, violaciones... al igual que otras ciudades
importantes como el Aiún (la capital), con
aproximadamente 200.000 h., situada al norte del
Sahara Occidental.
Al fin llegó la gran noticia. El rey de Marruecos,
Mohamed VI, había convocado elecciones para
decidir la independencia del pueblo saharaui, bajo
el auspicio de la ONU, esta vez iba en serio.
Intervendrían tanto la población exiliada como los
habitantes del territorio bajo dominio marroquí.
Con esta decisión, sin duda, la antigua colonia
española alcanzaría para siempre su status propio.