Layas de enebro en una proporción muy va
riable. De la variedad de esa introducción o
111ezcla de las sustancias volátiles de las ba
yas de enebro, se consiguen las diversas cla
ses de ginebras que se conocen en el merca
Jo,
tan disimiles unas de otras en su color,
sabor y
aroma que parecen licores de origen
distinto.
El culto leetor se habrá dado cuenta, sin
duda,
que
así como
¡Jfirn
hacer el mosto del
whisky y de la cerveza es necesario disolver
la pulpa o la pasta -espesa
que
se
hace
con el
lúpulo de la cebada y del centeno, en deter
minada cantidad de agua común
y
potable,
cou la cual mezcla so obtiene el mosto que
se
somete a la
fermentación
y, después
de
formentado, pasa a la destilación; a
s
imi
s
mo
es necesaria el agua, en proporción regulada,
para conseguir
el
mosto
de
la ginebra. ,Agré
gusclc, también,
a
esta elaso de aguardi
e
n
t
e
determinada cantidad de jarabe, con el cual
se hace la clase de ginebra
·
c¡u
o se co
no
c
e no
co1110
dulce,
s
i
no como no seca.
A
la ginebra
seca
o
dry
no
se le
agrega ninguna clase de
,jarabe.
Las
propiedades terapéuticas
do Ja ginebra
F.onn
o
tabl
es
.
Se ha. probado, de uua manera
que no da lugar
a
dudas, que las sustancias
de las bayas de enebro que se suman
a
la
ginebra en la elaboración de
Ja misma
ejer
cen una ncth-n
f
u
nci
ó
n
diur6tica.
Por
ese
motivo se recomienda el consumo de la gine
bra, en dosis razonables, a cuantos p
u
d
ec
e
u
de esa enfermcdad.
Es t
a
mb
i
6
n un producto
profilftctico contra las fiebres palúdicas y es
un grande estimulante para cuantos realizan
lnbores mentales largas
y
c
o
nti
nu
a
s
.
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